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ALGO no cuadra en los anhelos militaristas del Presidente.

TEMPLO MAYOR
en REFORMA
(15 Sep. 2022)
ALGO no cuadra en los anhelos militaristas del Presidente. Desde Palacio Nacional ha lanzado toda la caballería para que la Guardia Nacional pase a la Sedena. Pero… ¿y eso en qué va a cambiar la realidad de inseguridad que se vive en todo México?

LA PREGUNTA es importante porque la Guardia Nacional fue creada en marzo de 2019, desde entonces ha sido manejada por los militares… y la delincuencia sigue imperando en el país y los índices delictivos siguen igual de deprimentes que en el sexenio anterior.

ES DECIR, con esto del pase a la Secretaría de la Defensa Nacional, Andrés Manuel López Obrador ha querido desviar la atención de dos verdades más grandes que un tanque de guerra: que la Guardia Nacional es un fracaso, pues no tiene personal propio, y que la política de seguridad nomás no da resultados.

Y NO ES sólo una cuestión de cifras, sino de realidades como las de los transportistas en las carreteras de Veracruz; de los habitantes de Ciudad Juárez que murieron en una tarde de fuego; de los aguacateros que pagan tributo al crimen organizado; y un largo y doloroso etcétera.

 

POR CIERTO que sigue causando escozor el discurso de Luis Cresencio Sandoval en la ceremonia de los Niños Héroes. Y es que, con todas sus medallas al pecho en el uniforme de gala, el general de las cuatro estrellas dio la impresión de estarse metiendo en cuestiones políticas.

SI BIEN su mensaje estuvo centrado en el tema de la juventud, de pronto se lanzó contra quienes, según él, pretenden afectar a las instituciones armadas con «comentarios tendenciosos»… justo en medio del debate por la militarización del país. Y no sólo eso: también les dio un nuevo protagonismo a las Fuerzas Armadas al ponerlas como un sector más junto con el político, el económico y el social.

SERÍA BUENO saber si lo que está planteando es que los militares no están subordinados al poder civil, sino que también tienen voz, poder y decisión. Porque si es así, el general más bien ya sería generalísimo.

CUENTAN que en las oficinas de Claudia Sheinbaum están que echan lumbre, pues ya se enteraron de la jugada maestra que hizo el panista Santiago Taboada. Resulta que el alcalde de Benito Juárez logró sentar a la mesa a los principales dirigentes del sindicato de trabajadores de la Ciudad de México.

Y AQUELLO no fue sólo un desayuno para compartir chilaquiles, sino para hablar del futuro. Quienes estuvieron ahí se sorprendieron de lo bien que Taboada logró tender puentes con César Piña y Héctor Castelán, entre otros líderes seccionales del poderoso sindicato capitalino. ‘Ora sí que la que se fue de gira… a lo mejor pierde su silla.

¿QUÉ va a gritar esta noche el Presidente ante el Zócalo repleto? Para como están las cosas, no se sorprendan si en lugar de «¡Viva México!», AMLO se pone a tañer la campana al grito de: «¡Paso redoblado!, ¡marchen!, ¡ya!».

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