«NO TIENEN MADRE»: LA FURIA DE SALINAS PLIEGO TRAS EL ASESINATO DEL ALCALDE IGNORADO.

«No tienen madre – Pidió ayuda por todos lados y no le dieron nada – Pinche gobierno de mierda – bueno para saquear – Malo para dar», escribió Ricardo Salinas Pliego en respuesta al comunicado oficial del Gabinete de Seguridad sobre la muerte de Carlos Manzo. El empresario expresó lo que millones piensan pero no dicen: el gobierno federal abandonó al alcalde de Uruapan hasta que fue demasiado tarde.

Carlos Manzo rogó durante meses por apoyo federal. En septiembre canceló el Grito de Independencia pidiendo «auxilio urgente con toda la fuerza del Estado». En mayo suplicó que mandaran a García Harfuch porque «en todos los cerros hay grupos armados matando». En octubre pidió que no retiraran a la Guardia Nacional. «No quiero ser de la lista de ejecutados», advirtió. Nadie lo escuchó.

El 1 de noviembre, Manzo fue ejecutado frente a niños durante el Festival de Velas en Uruapan. Acababa de tomarse fotos con familias cuando los sicarios lo atacaron. Recibió tres impactos de bala y murió minutos después. Su escolta también falleció. Dos detenidos y un agresor abatido. Las condolencias del gobierno llegaron cuando ya no servían de nada.

Mientras el alcalde denunciaba cinco cárteles operando en Uruapan, campos de entrenamiento con sicarios extranjeros, fosas clandestinas y extorsiones diarias, Sheinbaum solo le respondía públicamente que «estaba equivocado» y su postura era «incorrecta». El gobierno prefirió criticarlo que protegerlo. Prefirió defender su narrativa de «abrazos no balazos» que salvar una vida.

Salinas Pliego dijo con todas las letras lo que el gobierno no quiere oír: este régimen es «bueno para saquear, malo para dar». Manzo pidió seguridad y le dieron discursos. Pidió fuerzas federales y le dieron críticas. Pidió no morir y le dieron indiferencia. Ahora el gobierno condena «enérgicamente» su asesinato. Hipocresía pura. Un alcalde de 40 años, padre de familia, está muerto porque su gobierno lo abandonó. Eso no tiene madre.