Estados Unidos exige nuevo visado para visitantes extranjeros y turismo enfrenta un retroceso histórico
El Departamento de Estado de Estados Unidos anunció un cambio significativo en los requisitos para los viajeros internacionales que buscan ingresar al país. A partir de ahora, los solicitantes de visas de no inmigrante —incluyendo turistas, estudiantes, trabajadores temporales y viajeros de negocios— deberán programar una entrevista en la embajada o consulado de EE. UU. en su país de residencia, lo que añade una nueva barrera a un proceso ya marcado por extensos tiempos de espera.
Nuevos requisitos para visas de turista y negocios
El anuncio, con vigencia inmediata, establece que los solicitantes deberán demostrar residencia en el país donde presenten su solicitud. Aquellos que intenten realizar el trámite en una embajada fuera de su lugar de origen podrían enfrentar mayores dificultades para obtener la visa.
El Departamento de Estado advirtió que las tarifas de solicitud no serán reembolsables ni transferibles, incluso si la visa es denegada. Este endurecimiento de requisitos se suma a la preocupación por los retrasos en las entrevistas, que en algunos países pueden superar un año de espera.
Impacto en el turismo de Estados Unidos
El sector turístico estadounidense ha expresado su alarma ante estas medidas. Según la Asociación de Viajes de Estados Unidos, los largos tiempos de espera ya representaban un problema estructural que disminuye la competitividad del país frente a otros destinos internacionales.
En 2024, los turistas extranjeros gastaron 181 mil millones de dólares en Estados Unidos, con un promedio de 4,000 dólares por viaje, ocho veces más que el gasto promedio de los turistas nacionales. Sin embargo, el 2025 se perfila como un año negativo: se proyecta una caída del 8.2% en las llegadas internacionales, según datos de Tourism Economics.
Pérdidas millonarias y caída en reservas aéreas
El Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC) estima que, en lugar de registrar un aumento de ingresos, Estados Unidos enfrentará una pérdida de hasta 29,000 millones de dólares en 2025 debido al desplome en las visitas internacionales.
Las reservas aéreas internacionales hacia Estados Unidos han caído entre 10% y 14% respecto al año anterior, mientras que las llegadas desde Canadá —que representan una cuarta parte del turismo entrante— se desplomaron hasta 43% en comparación con el mismo periodo de 2024.
Nuevas tarifas que complican aún más el acceso
A partir de 2026 entrará en vigor una “tarifa de integridad de visa” de 250 dólares, introducida mediante el “Big Beautiful Bill”, aprobado durante la administración de Donald Trump. Esta medida afectará a casi todas las visas de no inmigrantes, desde turismo hasta estudios y empleo.
Aunque el Congreso proyecta recaudar 27,000 millones de dólares en una década, la industria turística advierte que los efectos reales serán negativos: pérdidas anuales de 3,600 millones de dólares para la economía estadounidense, incluyendo 450 millones en impuestos no recaudados y la eliminación de 15,000 empleos vinculados al sector de viajes.
